DESAPEGO COMO HERRAMIENTA DE CONSTRUCCIÓN

EDITORIAL

Por: Juan Miguel Jaramillo Metrio

Director

Redacción San Buenaventura Estéreo 95.4 F.M.                                 

Martes, 28 de enero, de 2025

12:05 p.m.

Los comienzos suelen traer dudas, reticencias, cambios que muchas veces paralizan. La ansiedad que sentimos en los momentos de cambio en la vida, o el solo plantear realizar alguno, responde a la incertidumbre que genera lo que puede, o no puede, pasar en ese tránsito desde donde estamos y a donde queremos llegar.

Comenzando el año, se tiene la costumbre de poner metas, de ir por eso que se sueña y de conectar de nuevo con proyectos que están en construcción. Soñar es parte fundamental de la vida y es bueno hacerlo, siempre y cuando, genere la motivación para realizar esos sueños, motive a salir de su zona de confort y a vivir nuevas experiencias para aprender de ellas.

Aquí, algunos consejos para acompañar esos cambios propuestos iniciando el año y que, además, puede aportar mucho en nuestro día a día. Es necesario antes de iniciar a realizar cambios que transformen el mundo, empezar a cambiar el propio, así pues, lo primero será salir de artículos que ya no use, de ropa que no usa desde hace tiempo, de ropa interior rota, artículos rotos, cartas y notas antiguas, plantas muertas o enfermas, recibos y revistas antiguos, zapatos desgastados por el uso, cualquier tipo de objetos inútiles que recuerden el pasado, si tiene hijos, juegos que ya no usan, no funcionan o están rotos.

Estudios sugieren que estos cambios suelen mejorar la salud, aumentan la creatividad, mejoran las relaciones interpersonales, se tiene más capacidad de razonamiento y mejora el estado de ánimo.

No siempre es tan sencillo salir de aquello que no se usa, está malo o simplemente queremos conservar, por ello, cuando se empiece esta tarea vale la pena preguntarse ¿Por qué me quedo con esto? ¿Tiene algo que ver conmigo hoy este artículo? ¿Qué sentiré al deshacerme de esto?

Siempre, se debe revisar si aquello de lo que se va a salir puede donarse, debe tirarse, o se puede vender. Además, está actividad puede ser muy útil para realizar una limpieza general a nuestros espacios, organizar aquello que tenemos, clasificar nuestras pertenencias y al mismo tiempo sentirse a gusto con lo que se tiene. Es algo que no se hace con afán. Asegúrate de hacerlo a tu ritmo, ordenando la casa, observa lo que va cambiando en ti mismo.

 Una invitación a practicar el desapego y a ordenar nuestro interior.

Siempre nuestro exterior será reflejo de nuestro interior.

Paz, amor y chocolates.